Estamos
orando para que Dios abra el entendimiento y traiga revelación por
Su Espíritu Santo, a los amados "conspiranoicos",
a los que hemos seguido en sus blogs y a todos quienes sean
sinceros buscadores de la Verdad, para que acaben por
reconocer en Jesucristo la única solución para la humanidad y en la
Biblia la Verdad Absoluta que lo revela a Él.
Amados,
algunos os habéis acercado mucho a la Verdad. Buscáis con afán y
algunos además con pureza de propósito e incluso quizás os
encontréis cerca de Su Reino (Marcos 12:34); algunos de vuestros
artículos hasta podrían tildarse de bíblicos, pero la confusión
babilónica os tiene enredados y no os dejará hasta que
estéis dispuestos a abandonar el doble ánimo que os tiene
atrapados, porque algunos pretendéis reconocerLE sin obedecerLE.
Eso
no acontecerá hasta que rindáis vuestras vidas incondicionalmente a
ese Creador, quien no es otro que Cristo Jesús. Para ello tan solo
tenéis que pedirle a Jesús con vuestras palabras que se
manifieste en vuestras vidas. El siempre lo hace cuando se le
pide con corazón sincero. Cuando lo haga entonces podréis decidir
entregarle a Él vuestras vidas o no, porque solo en Su Luz vemos la
luz (Salmos 36:9); es decir, primero tienen que ser abiertos nuestros
"ojos", nuestro espíritu tiene que ser encendido, para que
pueda captar la realidad invisible, la cuarta dimensión; para que la
'parabólica' que se dañó en la Caída del Edén (ese es el pecado
original: heredamos el 'Walkie-Talkie' dañado de Adán, porque de
Adán no vienen otra cosa que "adanitos").
Amados
sed humildes y no dejéis que la auto-complacencia, ni el pensar que
habéis llegado, ni el haber descubierto algo o mucho de la verdad,
ni el conocer algunos misterios ocultos, ni las muchas visitas a
vuestros blogs, os cieguen. Si no nos hacemos como niños no podemos
entrar al Reino de los Cielos (Mateo 18:3).
Romanos
10:6-11
6
Pero la justicia que es por la fe dice así: No
digas en tu corazón: ¿Quién subirá al cielo? (esto es, para traer
abajo a Cristo); 7 o, ¿quién descenderá al abismo? (esto
es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos) (Es
decir, nadie puede salvarse a sí mismo, solo puede clamar al
Salvador por la fe, para que suba o descienda hasta él, nadie puede
pagarse el billete al Cielo, es gratuito y se recibe aceptándolo sin
merecerlo, como dice en Efesios 2:8-10). 8 Mas ¿qué
dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca
y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que
predicamos: 9 que si confesares con tu boca
que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón
que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10
Porque con el corazón (en tu interior)
se cree para justicia (ser declarados justos al
ser salvos en nuestros espíritus y
tener vida eterna),
pero con la boca se confiesa (decirles a otros
que nos hemos entregado a Jesús, que ahora es nuestro Amo, que le
pertenecemos; eso quiere decir que el manda y nosotros le obedecemos.
Esto es todo lo contrario a servir religiosamente a ídolos que nos
dejan hacer lo que nos da la gana) para salvación
(crecer y madurar en la justicia para que nuestras
almas también
alcancen la salvación en este tiempo de vida y así poder reinar
con Cristo en Su Reino Milenial, tras
Su inminente Segunda Venida). 11 Pues la Escritura
dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
(Resaltados
en grueso, cursiva y subrayados han sido añadidos).
ReconocerLE,
que es creer en Él, pero circunvalar Su Señorío (la obediencia
debida) no es suficiente, porque de esta forma aunque se rechace
el Satanismo-Luciferanismo se sigue pregonando un mundo "humanista",
pero a la postre un mundo igualmente sin Dios. No basta
reconocer al Creador (Jesucristo) sin someternos a Él. Cuando
aceptamos en Jesucristo la Vida eterna, Dios entonces, además de
nuestro Creador, pasa a ser nuestro Padre, pues
adquirimos Su misma vida y Su misma naturaleza; pasamos de ser
simples criaturas de Dios a ser Sus hijos y cuando nos
sometemos a Su señorío entones Él se convierte también en nuestro
Señor:
Juan
1:12
Mas
a todos los que le recibieron,
a los que creen en su nombre, les dio potestad
(posibilidad)
de ser hechos hijos de Dios;
Vemos
que dice posibilidad o potestad de "ser hechos", lo
cual establece claramente que en este planeta existen dos tipos de
seres humanos: criaturas de Dios e hijos de Dios. Entre los
hijos, algunos alcanzan la madurez en esta vida y llegan a ser Sus
íntimos, los que la Biblia llama vencedores, los cuales son los
únicos entre los hijos o cristianos, que llegarán a reinar con Él
en el Reino Milenial.
No
escogemos la condición caída en la que venimos a este mundo, que
nos es impartida por simple herencia genético-espiritual, pero si
podemos decidir escaparnos de ella escogiendo la Vida eterna,
escogiendo ser hijos de Dios al recibir a Jesucristo como nuestro
Salvador, para dejar de ser muertos vivientes o zombis, como el resto
de los descendientes de Adán:
1
Juan 5:12
El
que tiene al Hijo,
tiene la vida; el que
no tiene al Hijo de
Dios no tiene la vida.
Esto
requiere un nacimiento espiritual o de lo Alto (véase capítulo 3
del evangelio de Juan).
Ni
NESARA*,
ni la ENERGÍA LIBRE, ni ninguna otra cosa que obvie al Redentor es
suficiente para sacarnos de nuestra condición de criaturas caídas
espiritualmente muertas y de corazón perverso y egocéntrico.
*NESARA
es un acrónimo que hace referencia a una a ley estadounidense
conocida como National Economic Security and Reformation Act. La ley
habría sido aprobada durante una sesión secreta del Congreso de los
Estados Unidos y ratificada por Bill Clinton antes de dejar su cargo.
Wikipedia
(ES)
¡Someterse
al Señorío de Jesucristo, Dios encarnado, es la única SOLUCIÓN
para que el universo sea liberado de su esclavitud de corrupción a
la libertad gloriosa de los hijos de Dios (ver Romanos 8 a pie de
página), la única manera de hacer huir al diablo!:
Josué
24:15
Y
si mal os parece servir a Yahweh, escogeos
hoy a quién sirváis;
si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando
estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en
cuya tierra habitáis; pero yo
y mi casa serviremos a Yahweh.
Stg.
4:4-8
¡Oh
almas adúlteras! ¿No sabéis que la
amistad del mundo es enemistad contra Dios?
Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye
enemigo de Dios. 5 ¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El
Espíritu que Él ha hecho habitar en nosotros nos anhela
celosamente? 6 Pero Él da mayor gracia. Por lo cual dice: Dios
resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. 8
Acercaos a Dios, y él se acercará a
vosotros. Pecadores, limpiad las manos;
y vosotros los de doble ánimo (los
que apuestan a los dos bandos: Dios y el mundo),
purificad vuestros corazones.
Vídeo:
"Thrive
es un excelente documental, que nos presenta muchísima verdad, pero
en una visión utópica, puramente humanista,
incluso podría decirse panteísta. Creemos
que obvia la verdad fundamental y absoluta: la
existencias de un Dios Soberano y Creador de todo lo
que existe, material o inmaterial. Omite o niega, por tanto, la
condición espiritual del hombre caído,
depravado por naturaleza hasta la médula, aún hasta en sus mejores
expresiones de cultura, intelectualidad y moralidad (todas ellas
provenientes del mismo Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal) y
negando así mismo su necesidad de redención. El
hombre es capaz en algunos casos de alcanzar altísimas cimas de
moralidad y civismo, pero absolutamente incapaz de cambiase a si
mismo, de cambiar su naturaleza pecaminosa. Thrive niega
pues la existencia del pecado y de su autor Satanás; precisamente el
ser que en estos momentos gobierna nuestro planeta (aunque por
poco tiempo ya) desde la cumbre de esa pirámide, que tan bien se nos
muestra en el documental.
Creemos
que el universo en general y nuestro mundo en particular nunca podrán
alcanzar paz verdadera sin la justicia imputada de manera gratuita,
al creer en el Cristo Redentor que derrotó a Satanás al morir en la
cruz del Gólgota, para pagar el castigo que nos liberaría de
nuestros pecados (consecuencias) y pecado-naturaleza pecaminosa o
caída (causa): Jesucristo hombre, el Hijo del Dios Viviente Creador
de todas las Cosas.
Presenta
un universo sin decir su procedencia, que aun siendo impersonal crea
todas las cosas por si solo, que se auto-regula y auto-sostiene y que
por si mismo puede alcanzar la perfecta armonía y madurez, por el
simple crecimiento o evolución en el tiempo, hasta llegar a la
perfección.
Mientras
el autor de la maldad, el diablo y sus acólitos, no sean
definitivamente desalojados de la cúspide de la pirámide y la
tierra sea gobernada por Jesucristo y sus redimidos nunca habrá paz,
porque "la
no agresión",
la moralidad al margen del Dios Creador, no es verdadera paz (Juan
14:27: La
paz os
dejo, mi
paz os
doy; yo no os
la doy COMO
EL MUNDO LA DA). Cristo,
por contra, estableció la Ley
Suprema del Amor,
que transciende la Ley
del Talión o de la Justicia ("ojo
por ojo", dar a cada uno lo que se merece, etc.), y también
la Ley
del Perdón (olvidar,
no exigiendo restitución por el mal que nos han causado); porque el
Amor, es decir, la Gracia, no solo perdona, sino que aún bendice al
ofensor.
El
hombre necesita lo que ni siquiera puede darle un medrar
infinito, pues sería un medrar en la imperfección: un
cambio de corazón (Gálatas
6:15: Porque
en Cristo Jesús ni la circuncisión vale nada, ni la incircuncisión,
sino una
nueva creación).
El
hombre caído gime con toda la creación aguardando la manifestación
de todos aquellos que, dando la espalda al Árbol del Conocimiento
del Bien y del Mal (el árbol de la moralidad, árbol de la muerte),
decidieron gustar la redención, comiendo gratuitamente del
Árbol de la Vida: Cristo (el billete al cielo -una nueva
naturaleza-, no se puede comprar); solo entonces la muerte dejará de
reinar.
Rom
8:19-23
Porque
el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la revelación
de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sometida a
vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la
sometió, en esperanza 21 de que también la creación misma será
liberada de la servidumbre de la corrupción, a la gloriosa libertad
de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación
gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; 23 y no
solo esto, sino que también nosotros mismos, que tenemos las
primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros
mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo.
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